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lunes, 7 de octubre de 2013

CÓMO LE AYUDO EN LOS ESTUDIOS

CÓMO LE AYUDO EN LOS ESTUDIOS


CONSIDERACIONES A TENER EN CUENTA
 
- Este folleto está dirigido a las familias de niños y niñas de 6 a 12 años
aproximadamente y ofrece solo unas orientaciones básicas sobre el
tema.
 
- Cuando hablamos de estudio, nos referimos a todo lo que tiene que ver con el trabajo escolar: hacer deberes, trabajos, resumir, repasar y
propiamente estudiar o asimilar contenidos.
 
- Cada niño o niña tiene su propio estilo y preferencias a la hora de
estudiar, por ello es importante conocerlas y adaptarse a ellas. Como
normal general, si algo le funciona es mejor no modificarlo.
 
- Más metidos en el tema, es muy importante que los padres y madres
tengan en cuenta que los estudios son responsabilidad del chico. Esto
es clave, no solo que lo tengan presente las familias, sino que lo
inculquen y transmitan a los hijos: aunque los padres puedan
colaborar, los estudios son cosa de ellos.
 
- Los padres no son profesionales de la enseñanza: si bien los
contenidos que aprenden los niños en estas edades son fáciles,
enseñarlos no lo es. El trabajo de enseñar es de los profesionales
preparados para ello: los maestros y maestras.
 
- Los padres pueden colaborar en los aspectos que se indicarán a
continuación, a través de las pautas que se proponen.


 
1. VALORAR LOS ESTUDIOS
 
- La primera pauta es que la familia valore los estudios.
 
- Esto se hace de diversas formas: transmitiendo expectativas y
mensajes positivos hacia ellos, dándoles la prioridad que merecen
en la vida del hijo o de la hija.
 
- Supone prestarles atención y valorar los logros que el chico
consigue.
 
- También supone dar ejemplo de responsabilidad y cumplimiento
del deber por parte de los padres.


 
2. GARANTIZAR UNAS CONDICIONES MÍNIMAS
 
- Con esto nos referimos a que se garanticen desde el hogar unas
pautas de sueño y alimentación adecuadas para afrontar el
trabajo intelectual.
 
- Que se disponga de un espacio de estudio en casa con
temperatura e iluminación adecuadas y sin distracciones.
 
- Evitar interrupciones durante el tiempo de estudio y una
serenidad emocional en la vida del chico.


 
3. ELABORAR HORARIO DE ESTUDIO
 
- Los padres pueden colaborar elaborando un horario de la tarde
del niño o de la niña. En este horario se incluirán las diferentes
actividades que lo ocupan, incluyendo un tiempo diario para
estudiar.
 
- El horario se utilizará como referencia principal, aunque en
algunas ocasiones se sea flexible y pueda modificarse.
 
- De forma orientativa proponemos los siguientes tiempos de
estudio:
 
o 1º y 2º de Primaria, 6 y 7 años, unos 40 minutos;
o 3º y 4º de Primaria, entre 60 y 90 minutos;
o 5º y 6º de Primaria, alrededor de 90 minutos;
o En Secundaria, entre 90 minutos y 2 horas.
 

4. SUPERVISAR
 
- Supervisar implica estar pendiente de ciertos aspectos del
estudio: del cumplimiento del horario de estudio, del
aprovechamiento del tiempo, de la realización de los deberes… en
definitiva estar informado de la marcha general. También supone
estar pendiente para elogiarlo y animarlo.
 
- Una forma de estar informados es revisar los cuadernos de clase,
donde en ocasiones, los profesores dejan observaciones.
 

5. AYUDAR A ORGANIZARSE
 
- Es bueno que le ayuden y enseñen a organizarse: a preparar lo
necesario para el día siguiente, a usar la agenda, las listas de
tareas, los calendarios o a priorizar las obligaciones.
 
- Hasta los 8 años o 3º de Primaria, es más eficaz utilizar un
cuaderno que la agenda. Esta se puede empezar a usar a partir de
los 9 años o 4º de Primaria.


 
6. MANTENER CONTACTO CON EL COLEGIO
 
- Mantener contacto con el tutor o tutora es una forma de darle
importancia a los estudios y de estar informado, además, es una
manera de prevenir posibles dificultades. Como mínimo sería
conveniente mantener una entrevista en cada trimestre, aunque
el chico o la chica no tenga ningún problema.
 
- Si se necesita ayuda, se deben solicitar pautas claras y
concretas: qué tengo que hacer; cómo y con qué lo hago.
 

7. OFRECER AYUDA DIRECTA
 
- Aunque la familia puede ayudar en aspectos concretos, ayudar no
es sustituir, ni solucionar los problemas por el hijo o la hija.
 
- Algunas formas de ofrecer ayuda directa son: interpretar las
instrucciones de una tarea, facilitar información, resaltar
información clave o comprobar si se ha asimilado un contenido.
 

8. PROMOVER OTROS APRENDIZAJES
 
- Por último, siempre pueden promover otros aprendizajes como
fomentar la lectura, mejorar los idiomas, profundizar en el uso
educativo de las nuevas tecnologías, el gusto por la música, la
visita de museos, exposiciones, el teatro, acudir a conciertos y
todo lo relacionado con el enriquecimiento cultural.